Devalo – Noites contadas

Hace ya algún tiempo que el pequeño sello ferrolán Ferror Records se ha convertido en una garantía de música de calidad, de propuestas de enorme interés hechas desde nuestro país, con el compromiso (ellos le llaman militancia) y la autogestión como raíles a la hora de construir su catálogo.

Aún así, no podía esperar la maravillosa sorpresa que fue escuchar por primera vez «Noites contadas» de Devalo. Un verdadero shock que removió muchas cosas en mi cabeza (y que supuso una pequeña revolución en la casa del Octopus, que tuvo sus frutos casi inmediatos).

Devalo es el proyecto de David Miranda, anteriormente en grupos como Nouvelle cousine o The cripple and the tramp. «Noites contadas» (Ferror Records, 2020) es a priori un disco de synthpop grabado en el «exilio» en Gales y cantado en gallego, pero al fin y al cabo es mucho más que eso. Es un canto a la morriña, un himno que cantarán los que, cuando les sea posible, para volver a crecer, vuelvan volando a casa.

Con la maravillosa y berlangiana «Neve de maio» como corazón del disco, en «Noites contadas» nos abrazan melodías y ritmos de pop electrónico de diversas procedencias, aunque todas ellas actualizadas y personalizadas bajo el prisma de la Galicia ausente del siglo XXI: «Espertar marítimo» y su aroma a los Depeche mode más tristes, «Aves negras», berlangiana también pero más abierta y luminosa, la fantástica «Teoría de todo» y su leve recuerdo a The cure, «Gardiáns do baño» y «A forza invisible» y su ritmo New Order, el recuerdo a The new raemon en «A linguaxe das máquinas» o «Saltando xigantes», el dreampop de «Montalvo», esa enorme y alucinante «O perseguidor».

Uno de los discos más impactantes y emocionantes que he escuchado este año. Solo me queda la pena de no poder comprarlo en formato físico.