A las primeras notas de la brillante «Clash the truth», que abre el disco del mismo nombre, ya sé que me va a atrapar, veloz como un rayo. Y así son las canciones de este disco: como los rayos de sol del amanecer que van rasgando la oscuridad azul del final de la noche. Y cada vez brillan más y cada vez ayudan mejor a luchar contra la oscuridad.
El segundo disco de Beach Fossils, también para Captured Tracks, tiene el sabor de los clásicos. A esto me refería cuando decía que el nuevo de My Bloody Valentine tiene el problema de haber sido superado por sus alumnos; éste es un ejemplo. Más melódicos que MBV, más ruidosos y menos sutiles que Yo la tengo, menos infantiles que The pains of being pure at heart, más luminosos (otra vez) que Sonic youth. Todo eso está en la citada «Clash the truth», y también en la vibrante «Generational synthetic», en «Careless» y su bajo al estilo de los primeros The Cure, en «Taking off», en la maravillosa «Shallow» y en la espectacular «Birthday», para la que se me acaban las estrellas. Discazo.
(Nota.- El video que añadimos aquí NO es oficial, pero lo elegimos porque aún no hay video oficial de ninguna de las canciones de este disco y porque «Birthday» es una pasada de canción)
El jardin de Octopus 